El ente regulador Europeo y la FDA determinaron una regulación que limitaría el valor de SPF máximo a «50+». Esto quiere decir que comprar un filtro cuya etiqueta diga “protección 100” es incorrecto. Independientemente del filtro que adquiera debe reaplicarlo cada 2-3 horas, porque TODOS pierden su efecto, esto aplica también para antes y después del baño en piscina o playa.